Nuestros otros blogs
Destacamos
Tags
Ver más
El blog de
Es un must de cualquier consola familiar. Sí, Nintendo Switch es la auténtica referencia en este sentido, y por eso, además de ofrecer un gran catálogo de juegos —Zelda, Animal Crossing, las últimas generaciones de Pokémon—, dispone de un completísimo control parental.
Para quien no tiene niños cerca es irrelevante. Pero en el resto de casos dichas funciones son factores de compra críticos. Al fin y al cabo los juegos están pensados para distintas edades.
De hecho, en las carátulas aparecen una clasificación por edades el famoso PEGI. El problema está en que cualquier peque puede jugar a juegos "para mayores". ¿Cómo evitar esto? Ahí vamos con el control parental de Switch.
Nintendo está muy enfocado en cuidar a los más pequeños, así que lanzó hace ya un tiempo una aplicación con la que poder llevar un buen control parental. La tienes disponible tanto en Google Play como en App Store.
Una vez te bajes la aplicación te podrás poner manos a la obra. Eso sí, vas a necesitar acceso a la Nintendo Switch porque es necesario vincular la consola con la app.
En primer lugar, vas a tener que descargar la aplicación. La puedes encontrar en cualquier buscador bajo el nombre "Control parental de Nintendo Switch".
Al entrar en la aplicación nos aparecerá Bowser y el mensaje "Uso de datos" en la esquina inferior derecha. Si pulsas ahí, te mostrará los permisos que te pide la app y para qué los usará.
Lo siguiente es pulsar "Continuar" para que te redirija a una nueva ventana. Lo que tienes que hacer es entrar con la cuenta de Nintendo que usas o crearte una nueva si quieres que el peque solo utilice esa.
Para iniciar sesión te llevará al navegador, una vez que termines este proceso te llevará de vuelta a la app y tendrás que elegir el usuario que quieres gestionar. Una vez lo selecciones, escoge "Elegir esta persona".
Tienes que aceptar los procesos y te aparecerá un código en la pantalla. Es el que vas a tener que colocar en la Switch para enlazarlos.
Control parental de Nintendo Switch
Arranca tu Nintendo Switch y busca el menú de la parte baja de la pantalla. Lo siguiente es entrar en "Configuración de la consola", el penúltimo si empiezas a contar por la izquierda.
Se te debería abrir una nueva ventana con toda la configuración de la Switch, pero la que te interesa está bajando un poco. Llega hasta "Control parental" y quédate encima. A la izquierda, tienes que darle a "Ajustes de control parental".
La consola te dirá que te descargues la app, pero como ya la tienes bajada, lo siguiente es que introduzcas el código que tienes en el móvil. Si has puesto el código bien la consola te preguntará si quieres que se vincule con la aplicación del móvil. Solo tienes que pulsar en "Sí".
El último paso que te queda es dejar todo a tu gusto. Presiona en "Proseguir con la configuración en un dispositivo inteligente" y ya podrás empezar a personalizar el control.
Lo primero que te aparece cuando empiezas con la configuración del control parental en la Nintendo Switch es establecer el tiempo límite que tiene cada sesión de juego.
Esto se traduce en que vas a poder ponerle un tope al tiempo que juega el peque: desde un mínimo de 15 minutos hasta el máximo de tiempo que quieras.
Lo siguiente que puedes modificar es el tipo de juegos al que se puede acceder con esa cuenta. La app tiene algunas opciones predeterminadas según el rango de edad, pero también se puede personalizar.
Si optas por "Personalización" tienes que elegir entre tres variables. La primera de ellas es la clasificación de juegos que puede usar, el conocido PEGI 3 o PEGI 12.
El siguiente apartado que se puede gestionar son las capturas de pantalla. Si quieres que no se pueda hacer ninguna grabación o foto de lo que aparece, solo tienes que activar esto.
Por último, hay una de las mejores opciones en nuestra opinión: bloquear el chat con otros usuarios. Este tipo de conversaciones pueden ser muy peligrosas en algunos juegos, así que no está de más prevenir.
Una vez que hayas configurado todas estas opciones, lo único que te queda por hacer es darle a "Aceptar" y se abrirá una nueva pantalla. Presiona "Configurar" y estará listo.
Si tienes una sola cuenta y te da pereza crearte otra, también puedes poner una contraseña al control parental. De esta manera te saltarás el bloqueo siempre que quieras. Eso sí, gasta cuidado para que no se entere el peque de cuál es.
El control parental en la Nintendo Switch da gusto. No solo porque funciona genial, es que encima es muy intuitivo y se puede configurar desde el móvil en un momento. ¡Super Mario vuelve a ganar! 🍄
