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Nosferatu regresa a la gran pantalla. La vuelta de este clásico más de 100 años después tiene expectante a los amantes del cine que se mueren por saber cómo su director, Robber Eggers, traerá de nuevo a la vida este gran hito de la historia cinematográfica.
Desde su primer estreno en 1922, el clásico dirigido por F. W. Murnau se considera un ejemplo fundamental del cine mudo y un exponente del expresionismo alemán, un movimiento artístico que subrayaba la distorsión visual para evocar el terror y la ansiedad.
Robert Eggers, conocido por su enfoque en el terror psicológico y su dedicación al detalle histórico, promete una adaptación que hará justicia a la atmósfera original de la película.
Todos los ojos están puestos en su protagonista Bill Skarsgård, conocido por sus aproximaciones al cine de terror en su conocido papel como Pennywise. Pero ¿qué podemos esperar de este estreno que está dando tanto que hablar?
Ante el panorama que presenta el cine de vampiros, todos los ojos están puestos sobre, la que, en su momento, fue un exponente de su género.
La prensa ya anticipa que la película, la cual se estrenará en un par de semanas, es un completo éxito y cumple todas las expectativas.
En la trama de Nosferatu (la original), la historia gira entre el conde Orslok y Hutter, enviado a firmar un trato inmobiliario desde Wisborg a Transilvania. Tras ser mordido, Hutter descubre que Orslok es en realidad un vampiro y temerá por la vida de su esposa en su vuelta a casa.
Como un clásico exponente de lo que fue el expresionismo alemán, nos encontramos con una película oscura no solo en la trama sino en su propia estética y construcción de personajes.
Una historia que adapta de manera alternativa Drácula de Bram Stoker dándole otros orígenes y nuevas dimensiones.
Lo que hace que Nosferatu sea única no es solo el horror físico que el vampiro representa, sino también la atmósfera de terror psicológico y la lucha interna de los personajes, atrapados entre el horror tangible y lo desconocido.
Robber Eggers ha sido el encargado de darle vida a la historia de Nosferatu, un director conocido por otras películas del género cómo la La bruja (2015) o El faro (2019).
Eggers destaca por el uso de elementos folclóricos y mitológicos, así como por sus esfuerzos por garantizar la autenticidad histórica, por lo que seguramente estemos ante una adaptación fiel a su antecesora.
Como dato de color, paralelamente a Nosferatu, su cuarta película, se encuentra realizando una miniserie sobre la vida de Rasputín que esperamos que salga a la luz pronto.
Seguramente te suene Bill Skarsgård porque dio vida al payaso asesino Pennywise en el remake de It (2017), una película que resultó en un éxito en taquilla.
El reparto de la película se completa con Nicholas Hoult, Willem Dafoe, Lily Rose Depp, Emma Corrin y Nicholas Hoult como el resto de reparto. Ya hay rumores de la crítica en torno a una posible nominación al Óscar.
Nosferatu está cumpliendo todas las expectativas que se ha puesto sobre ella. Las primeras críticas de prensa ya hablan de la película de terror del año, por lo que podemos esperar una recreación a la altura de lo que supuso el film original en su época.
Con una subtrama que explora la posesión, las primeras informaciones ya han dado mucho de sí y la prensa especializada está más que segura de que la película va a arrasar en las entregas de premios.
En palabras de David Ehrich de la revista Indiwire, "Está claro que Eggers adora a este tío, y la interpretación entregadísima de Skarsgård permite al filme disfrutar haciendo que el arquetipo del vampiro regrese a sus orígenes bestiales".
Estamos frente a un posible regreso revitalizado del género y Nosferatu se posiciona como un nuevo exponente en el cine de terror en su concepto más clásico, ya que no solo juega con lo artístico y lo tenebroso, sino también explora lo psicológico y los roles de poder.
Ante los intentos fallidos por regresar a este género en años anteriores, la película no solo hace su papel de remake a la altura, sino que abre la puerta a posibles producciones que exploren este género desde un enfoque más oscuro y siniestro, similares al aura que transmite el film.
La peli original de Murnau marcó un hito con su capacidad para transmitir el miedo a través de imágenes perturbadoras y una estética sombría. Esta nueva versión también explorará lo vampiresco, pero con un enfoque que da más espacio a la angustia emocional y los dilemas internos de los personajes.
La historia le da una vuelta a al clásico y se convierte no solo en un cuento de terror, sino en una reflexión sobre la desesperación humana, ampliando el espectro de emociones que encontrábamos en el film clásico de 1922.
La fecha de estreno en grandes pantallas es el 25 de diciembre. Así que, si te va lo de pasar una Navidad terrorífica, hazte con tus entradas porque este estreno no va a tener desperdicio. ¡Ya no queda nada! 🧛
