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No te descubrimos nada si te decimos que el mercado de las criptomonedas es volátil. Mucho, muchísimo. Por eso hasta el propio Elon Musk tuvo que dar un paso atrás con el tema de poder comprar Teslas con bitcoins.
Imagínate que el billete de 5 euros que llevas en la cartera hoy vale eso, pero mañana de repente vale solo 1 euro. Estás perdiendo y ganando pasta todos los días sin que puedas hacer nada al respecto.
Detrás de esta volatilidad está la famosa minería y los protocolos de consensos. Es el bien y también el mal de la descentralización. ¿No quieres intermediarios? Genial, pero entonces acepta esta incertidumbre y diversifica tus ahorros obligatoriamente.
Bueno, pues este "problema" fue el que derivó en 2014 de Tether, la primera stablecoin. Tras ella llegarían USD Coin, Binance USD, PLEX o CELO entre muchísimas otras.
Estas divisas, a diferencia del bitcoin y compañía, no se generan mediante minería tradicional y por tanto su valor no cambia tanto. Son valores paritarios del dinero fiduciario (el real), mucho más estable en el tiempo. ¿Para qué sirven si no se puede ganar dinero con ellas?
Durante las crisis los inversores suelen mover todo su dinero a los metales preciosos (generalmente el oro). Así se protegen de las pérdidas. Bueno, pues ese mismo papel es el que tienen las stablecoins en el mercado de las criptomonedas.
¿Por qué te contamos todo esto? Pues porque en los últimos meses no ha dejado de hacer ruido Terra (LUNA), el proyecto que promete hacer de "blockchain" para todas las stablecoins. ¿La stablecoin de las stablecoins? Puede ser.
*Actualización*: Terra (LUNA) sufrió una caída histórica el 11 de mayo de 2022. En menos de una seman pasó de valer 75 USD a cotizar por tan solo 0,000005 USD. Al tropiezo del 99% de su valor le siguió una recuperación del 1000%, que ha dejado a la divisa en los 0,0002 USD. Miles de personas se han arruinado.
Detrás de Terra está TerraLabs (muy originales por su parte), una empresa de Corea del Sur liderada por Daniel Shin y Do Kwon. Estos dos ingenieros anunciaron el proyecto en 2018 con la idea que ya te hemos explicado: crear una blockchain de stablecoins.
El desarrollo se inició en enero de ese año, y su mainnet oficialmente se lanzó en abril de 2019. A partir de septiembre de 2020 comenzó a ofrecer stablecoins vinculadas al dólar, al won de Corea del Sur, al tugrik de Mongolia y a la cesta de divisas de Derechos Especiales de Giro del FMI.
A ver, seamos un poco más concretos. No es que Terra sea una red de stablecoins. Es una infraestructura sobre la que los desarrolladores de DeFi pueden descargarse todo tipo de recursos para trabajar. Ahí el token LUNA y los algoritmos hacen el resto.
Te llame la atención o no, la realidad es que Terra es en 2022 todo un fenómeno. Luna Foundation Guard (LFG), el fondo de reservas del proyecto, lleva tiempo comprando monedas y sus responsables buscan acumular nada menos que 10.000 millones de dólares en BTC.
¿Sabías que muchos inversores creen que el máximo del bitcoin del pasado 28 de marzo se lo atribuyen a Terra? La divisa reina alcanzó los 48.000 dólares de cotización y hay quienes lo achacan a la blockchain surcoreana.
Lo más importante de todo es que Terra es un protocolo que no depende de ninguna otra blockchain. Esto te sonará porque la mayoría de divisas utilizan la blockhain de Ethereum por la rapidez y la seguridad que ofrece.
En cuanto a la definición de la propia Terra, qué mejor que acudir a los desarrolladores y al whitepaper para entenderlo en pocas palabras. Ya te adelantamos nosotros: mercado cerrado para comprar y vender stablecoins.
"Terra es el principal protocolo de blockchain público descentralizado y de código abierto para las stablecoins algorítmicas". Hasta ahí lo que ya habíamos mencionado más arriba.
"Utilizando una combinación de incentivos de arbitraje en el mercado abierto y la votación descentralizada de Oracle, el protocolo Terra crea stablecoins que siguen consistentemente el precio de cualquier moneda fiduciaria". Estabilidad al poder.
"Los usuarios pueden gastar, ahorrar, comerciar o intercambiar stablecoins de Terra al instante, todo ello en la blockchain de Terra. Luna proporciona a sus poseedores recompensas y poder de gobierno". El token, por tanto, incentiva.
Es el mismo planteamiento que ya hemos visto en otros tantos proyectos que buscan hacer de intermediarios:
Yendo al grano, el precio de Terra oscila exactamente igual que lo hace el dólar o el euro: guiándose por la ley de la oferta y la demanda. La blockchain utiliza el protocolo PoS y, así, los usuarios tienen que hacer staking de LUNA para votar y validar bloques.
Ojo, que además del token LUNA también hay otro token llamado TERRA (es también el nombre de la red). Cada uno tiene sus propias funciones:
Así una respalda a la otra y viceversa. Terra tiene un pool y Luna otro. Para mantener el precio de la primera se añade o retira suministro desde el pool de la segunda. "Los usuarios queman Luna para acuñar Terra y queman Terra para acuñar Luna".
Hay dos frases de dinámica de acuerdo con la oferta y la demanda.
Cuando el precio de Terra es muy alto respecto a su volumen, el algoritmo incentiva a los usuarios a quemar Luna y adquirir Terra hasta que se equilibran ambas. Economía básica, vaya.
Los usuarios acuñan más Terra a partir de la Luna quemada hasta que esta alcanza su precio objetivo. La reserva de Luna se reduce en este proceso, aumentando el precio de Luna.
En la situación contraria, cuando el precio de Terra es demasiado bajo en relación con su parámetro, el protocolo incentiva a los usuarios a quemar Terra y acuñar Luna.
La disminución de la oferta de Terra provoca la subida de precio. Se acuña más Luna a partir de Terra quemada hasta que Terra alcanza su precio objetivo. La reserva de Luna aumenta y baja de precio.
Todo eso de la paridad absoluta es muy bonito, pero ¿qué pasa cuando un valor no es idéntico a otro con el que se está intercambiando? En esa situación uno de los dos usuarios involucrados en la operación se lleva ganancias y el otro pérdidas.
Es entonces cuando actúa el "módulo de mercado" (el algoritmo) para, como ya vimos, fomentar o desincentivar la quema y compra de Terra o Luna. Lo que hace el protocolo es permitir el intercambio 1 USD - 1 UST y viceversa en todo momento.
Para ello los inversores no tienen más que entrar en la herramienta Terra Station y seguir las reglas internas de la blockchain. Pero lo esencial es eso, que la estabilidad —y los ahorros— están asegurados en todo momento. Aquí el ejemplo.
Supongamos que 1 UST cotiza a 1,01 USD. Los usuarios pueden entonces utilizar la función de intercambio de mercado de Terra Station para cambiar 1 USD de Luna por 1 UST.
El mercado quema 1 USD de Luna y acuña 1 UST. Los usuarios venden su UST por 1,01 USD, ganando 0,01 USD a través del arbitraje, y sumando al pool de UST. Este arbitraje se mantiene hasta que el precio de las UST vuelve a coincidir con el precio del USD.
Este palabro tan rato (seignorage) es el equivalente al valor de una divisa menos el coste de su producción. En los inicios del proyecto el señoreaje se empleaba para financiar las recompensas del pool de la comunidad y Oracle.
Con la actualización Columbus-5 todo ese excedente pasó a ser sistemáticamente quemado para evitar desequilibrios. Ahora todos los Luna empleados en la generación de UST se eliminan.
El Proof of Staking de Terra está alimentado por Cosmos SDK y el sistema de verificación de consenso Tendermint. No hace falta que te quedes con estos nombres, solo que entiendas cómo funciona la minería en la blockchain.
Este sistema de votación a quién más staking hace en cada ronda asegura la validez de cada bloque. Imagina que alguien quiere estafar; necesitaría coordinarse con todos los votantes para falsificar el bloque.
Cuidado, porque este PoS solo permite participar en el consenso a los 130 mejores validadores. "El rango de un validador se determina por su apuesta o por la cantidad total de Luna bondeada". Lógico.
Ah, y en ese proceso también intervienen los delegados; usuarios que quieren recibir las recompensas del consenso sin ejecutar un nodo completo. Sí, como ya has deducido, todo inversor es un potencial delegado.
"Los delegadores apuestan su Luna a un validador, añadiendo al peso del validador o a la apuesta total. A cambio, los delegadores reciben una parte de las tarifas de las transacciones como recompensa de las apuestas".
Para ganar pasta en Terra tienes que dominar las tres fases de LUNA (poético, ¿eh?). Los delegados bondean sus token Luna a los validadores, ayudándoles a mejorar su ranking en el proceso de staking. Así ganan todos.
Pero cuidado porque la Luna tiene tres fases en las que varían las condiciones de negociación:
Hay mucho más que indagar sobre Terra y sobre LUNA, pero con esto ya tienes más que de sobra para empezar a operar. Recuerda que moverse en el mercado de las criptomonedas siempre conlleva riesgo, aunque sea con stablecoins. ¡Piensa antes de actuar!
